Cómo tener dinero. Te mostramos el secreto
Aunque se realice una planificación detallada de nuestra economía, no siempre contamos con la suma de dinero que necesitamos en un determinado momento. Y ese instante que no se puede postergar: debe ser aquí y ahora. Pero en este artículo te contamos cómo tener dinero siempre disponible para cualquier tipo de situación, ya sean gastos imprevistos, caprichos personales o inversiones profesionales.
Cuenta de ahorro con ingreso periódico
Una manera de tener dinero siempre disponible es precisamente ahorrarlo. Para ello, o eres una persona súper organizada y disciplinada, o bien puedes optar por ‘engañarte’ a ti mismo. El primer caso es fácil de entender: márcate unos objetivos de ahorro y cúmplelos a rajatabla. En el segundo caso, la situación es más singular: abre una cuenta de ahorro y establece una aportación periódica y automática, por ejemplo mensual o trimestral. Casi sin darte cuenta y a modo de autoimposición, irás ampliando tu capital con ingresos periódicos que, de otra manera, acabarías gastando en otros temas. Eso sí, si lo quieres es tenerlo siempre disponible, infórmate en tu banco sobre cuál es el periodo y las condiciones para poder retirar cantidades procedentes de esa cuenta, pues a veces los pagos se demoran más de un mes.
Invertir en Bolsa: un sueño muy real
El sueño de cualquier persona con aspiraciones a multimillonario es invertir en Bolsa por afición y recibir suculentos dividendos ‘sin trabajar’. Y aunque tiene mucho de utopía, en realidad no lo es tanto: hacerse rico sin esfuerzo es casi imposible, pero no ocurre lo mismo si lo que buscas es conseguir interesantes beneficios basados en la intuición o en la observación. Infórmate de cuáles son las condiciones para el reparto de dividendos de las empresas de la Bolsa e invierte cantidades moderadas que sean fácilmente recuperables.
Cómo tener dinero con préstamos online
Si en realidad buscas soluciones más sencillas sobre cómo tener dinero, una fórmula a caballo entre lo tradicional y lo moderno son los préstamos en línea. Tradicional porque se basa en la financiación personal a través de créditos, algo que lleva efectuándose desde hace siglos. Pero moderna porque ha revolucionado la forma de pedir y recibir créditos: ahora todo se tramita a través de Internet, la solicitud se acepta automáticamente y el dinero del préstamo se recibe en apenas unos minutos. Uno de los aspectos más interesantes de ello es que los portales web que gestionan estos préstamos inmediatos, como Credy, están siempre operativos, las 24 horas del día de los 365 días del año. Por tanto, bien se puede considerar una forma de conseguir dinero que siempre está a tu disposición. En Credy podrás solicitar hasta 3000$ a devolver en un plazo máximo de 30 días, una solución sencilla, flexible y que ya se ve respaldada por la confianza de miles de usuarios.
Préstamos con carro, una solución alternativa
Los microcréditos no son la única alternativa a los créditos de la banca tradicional. Los préstamos con carro son una solución a tener en cuenta. Se trata de un préstamo de dinero que la entidad de crédito te otorga con la condición de poner el coche como garantía de la devolución de dicho préstamo. Y mientras tanto, el usuario puede seguir utilizando su coche. En cualquier caso, no se trata de una opción recomendable si hay serias dudas de la propia capacidad económica para devolver el crédito, pues si hay algún incumplimiento, el prestamista ejercerá su derecho sobre el vehículo y lo reclaramará, perdiendo el cliente de esta manera un bien muy preciado.
Casas de empeño: dinero por desprenderse de objetos con valor
Las casas de empeño, por su parte, ofrecen otra solución parecida pero con un detalle totalmente diferente: el prestamista y el cliente llegan a un acuerdo de crédito según el cual el primero presta dinero al segundo con la condición de entregar una prenda (de ahí que también se llamen préstamos prendarios): esa prenda es un objeto de valor (joyas, tecnología, etc.) que el prestamista podrá vender si el cliente no cumple con su parte del acuerdo y no devuelve el crédito en el plazo pactado. Por tanto, aunque se establece un objeto como garantía, el prestatario no lo podrá utilizar mientras esté en vigor el acuerdo.
Tarjetas de crédito: la barra libre de dinero con consecuencias indeseadas
Por último, una última sugerencia para quienes estén interesados en saber cómo tener dinero siempre disponible: las tarjetas de crédito. Se trata de una tarjeta de uso en cajeros, comercios y todo tipo de establecimientos físicos u online que tiene una cantidad de dinero disponible a crédito. El usuario puede establecer límites a su uso, pero lo cierto es que tendrá siempre unos costes permanentes (mensuales, anuales, etc.), solo por el mero hecho de tenerla activada, independientemente de si se utiliza o no, algo que no ocurre por ejemplo en el caso de los préstamos rápidos.